Sin embargo, lo mejor se refleja en su conducción, pues con un peso de solo 580 kg, una relación peso/potencia de unos 2 kg por CV, y su nuevo acelerador Drive-By-Wire electrónico, este deportivo de propulsión trasera alcanza una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 2,8 segundos.
La ligereza del BAC Mono se consigue gracias a los materiales empleados en su construcción como el titanio o el plástico reforzado con fibra de carbono (CRFP). Pero la verdadera novedad es que se convierte en el primer vehículo del mundo en utilizar grafeno en su construcción, gracias a su asociación con Hydale Composite Solutions, aunque de momento, y a modo de prueba, solo se utiliza en los arcos de las ruedas traseras.
El grafeno es un material que se crea a base de láminas de carbono de un átomo de grosor, pero resultando ser un 20 % más ligero que el carbono y 200 veces más resistente que el acero.
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